En capítulos anteriores...[]
¿Qué habrá sido eso? Sonaba como una rama rompiéndose.
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Yo voy a buscar bayas al bosque. Yaina y Laura, limpiad esta sucia cabaña.
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Esta cabaña está a punto de hacerse pedazos. La prueba es la tabla que te ha caído.
En el capítulo de hoy...[]
Emmmm... ehhhh... ¿Acaso eso importa ahora?
Solo quiero saberlo. Porque si no, seguro que nos apuñalarás por la espalda.
A ver, ¿vamos a quedarnos aquí todo el rato o iremos a salvar a Mygh?
Lo haría, pero esta nos lo quiere impedir.
¡Pero si yo solo quiero que sigais vivos!
Emmm... No quisiera interrumpir pero... ¿Dónde está Zoru?
¡Oh, no! ¡Si no hacemos algo rápido, podría pasarle algo malo!
No os preocupeis. Iré yo. No quiero que corrais ningún peligro.
Pero mira, el fuego ya a cubierto por completo el bosque... no se puede entrar ni salir.
Tenias razón... si hubieramos ido, hubiera sido peor. Creo que... gracias.
No hay de qué. Pero no se si lo sabías, yo puedo volar. ¡Así que ya nos veremos!
Me había perdido por completo. Y fuera por donde fuera, habia paredes de fuego por todos lados. No podía respirar nada de oxígeno. Me empazaba a sentir cada vez más y más débil... Ese era mi fin.
Vi una silueta. No sabía quién era, pero yo ya no podía más. Sentía que esos eran los últimos segundos de mi vida, y pasaron lentamente. Después, sentí que alguien me arrastraba. Miré, y me encontré con mi hermano, Mygh.
¿Mygh? ¿Como es que tu todavía tienes fuerza?
Soy más grande y más resistente. Pero yo también estoy al límite de mis fuerzas...
No hay posibilidad de salir de aquí... dejemoslo. Total, a este paso nos encontrarían y matarían.
Mygh ya se había dado cuenta. Pero el era el mayor, y tenía que sacarme de aquí. Aún así, por el rostro ya sabía que era imposible.
Miré al cielo. Pensaba que sería la última vez que lo vería. Un Pokémon volaba por ahí, y empezó a descender más y más... Y bajó hasta nosotros. Era ella.
Gracias... *intenta disimular una tos*
Cuando al fin llegamos a casa, Yaina estaba en la cocina comiéndose lo poco que quedaba para comer.
En la habitación, Fuchi limpiando y Laura... bueno... arreglando.
Mygh, yo y Yaina fuimos a la habitación. Estábamos cansados y queríamos dormir un poco. Abrí la puerta y cuando me dirigía a mi cama, vi a Laura.
Laura lleva así todo el día. Pero no tiene suficiente poder para encajarlo en el techo. Ah, por cierto, ¿como se llama ella?
Algo me intrigaba. Nadie se dió cuenta, pero yo escuchaba todo el rato un ruido. Era como de fantasmas. Era como si fuera una llamada que sólo yo pudiera oír.
Miré por la ventana. ¡Vi un Pokémon! ¡No podía creerlo! ¡Estaba segura! Pero cuando lo dije, mis hermanos creyeron que estaba enferma... pero Ángela no. Ella permanecía callada. Fijo que ella tiene que ver con todo esto...